,

Pero a los ciegos no le gustan los sordos, y un corazón no se endurece porque si ~



7 de junio de 2010

# Todos hablamos mucho cuando nos cuantan cosas que les ocurre a otras personas. no sé por qué, pero nunca pensamos que pueden sucedernos a nosotros y, en cambio, el día menos pensado.. pam! te toca a ti, como si te hubieras traido mala suerte tú sola.